Guitarra Clásica

Las clases de Guitarra Clásica son dinámicas y divertidas, ya que la mejor manera de aprender, a todas las edades, es jugando.

Son múltiples los beneficios que tiene tocar un instrumento. Tocar la guitarra desarrolla la coordinación, ya que cada mano realiza movimientos distintos y dispares. Aprender a tocar la guitarra desarrolla la psicomotricidad fina. Además, es una forma extraordinaria de transmitir emociones.

La música es una materia muy íntimamente relacionada con otras. Se relaciona con la lectura, como el lenguaje universal que es; o con las matemáticas, ya que implica realizar cálculos matemáticos, al contar los tiempos. Así pues, la música mejora las habilidades del lenguaje y las matemáticas, la concentración, la conducta e incluso la inteligencia espacial.

Al tocar, sea individualmente o en grupo, se agudizan los sentidos y aumenta la concentración, se busca la precisión y todo el cuerpo trabaja en pro de la interpretación. También se desarrolla la constancia y la perseverancia, así como la memoria. El afán de superación y el esfuerzo diario redundarán en la vida en otros ámbitos que no sean los musicales.

Aprender a tocar un instrumento como la guitarra desarrolla la creatividad, el sentido crítico, la tolerancia, la autoestima, el saber estar y convivir y trabajar en grupo, y, en definitiva, a disfrutar del arte de la música.